La germinación del cannabis perfecta es algo muy subjetivo y, a menudo suele crear debate entre los cultivadores.
Hoy queremos poner luz a un tema tan básico como hacer que nazcan “nuestras niñas”. Y, por supuesto, compartir con vosotros el que consideramos el método más efectivo para una germinación óptima del cannabis.

No existe un único método de germinación, pero ¿existe el método de germinación definitivo? Muchos habréis probado o escuchado numerosas técnicas de técnicas de germinación. Las más comunes son poner las semillas 24 horas en agua, enterrarlas directamente en la tierra varios centímetros o colocarlas en semilleros de turba. Incluso algunas marcas de fertilizantes han lanzado al mercado “líquidos mágicos” para tal efecto.
Porcentaje de éxito
Todas las formas que acabamos de exponer, y algunas más, son válidas para la germinación. Pero si hablamos en porcentajes de éxito tenemos otra opción mas adecuada y eficaz. Hace ya varios años Sensi Seeds, el mítico banco holandés, dió una orden a tiendas y distribuidoras canábicas. Desde este momento no repondría semillas por fallo de germinación en las cuales no se hubiera usado el método que ellos indicaban. Nosotros también consideramos que éste es el método correcto para una buena germinación. Desde luego es el que mejor nos ha funcionado en estos años de experiencia.
Una vez hayamos escogido qué variedad queremos planta, para una germinación perfecta del cannabis necesitaremos:
– 1 trozo de papel de cocina
-2 platos
-Agua
-Paso 1: Colocar un trozo de papel de cocina sobre un plato húmedo (pero no encharcado). Una buena opción es usar un pulverizador.
-Paso 2: Poner la semilla o semillas encima del papel y doblarlo, quedando estas entre medias del papel.
-Paso 3: Tapar el plato con otro plato quedando el papel con las semillas en medio de ambos.
Debe quedar más o menos de esta forma:

Lo normal es que entre 2 y 4 días, en condiciones óptimas, veamos aparecer ya la raíz. Os preguntaréis qué temperatura es la óptima para traer al mundo a nuestras plantas, verdad? Según la fuente de información que busquéis variará, normalmente entre 20 y 25 grados. O lo que es lo mismo, en invierno buscar un sitio algo mas cálido que la temperatura ambiente, y en verano justo lo contrario.
Os vamos a exponer una lista de fallos muy comunes, a evitar si queremos que todo inicie de forma fructífera:
No tapar el plato con otro plato:
El más común, usar sólo un plato para la germinación. De esta forma el papel de cocina se secará y tendremos que hidratar continuamente, produciendo así cambios en el nivel de humedad y poder de gestación de nuestras semillas.
Demasiado papel:
En esto vamos a hablar desde nuestra experiencia más personal. Nos gusta solo usar un papel doblado, preferiblemente papel de cocina que es mas grueso que una servilleta normal. De esta manera la semilla suele germinar normalmente antes de que se seque el papel, no teniendo así que volver a hidratar el plato. Poniendo varias capas de papel es muy probable que tengas que volver a rehidratar, con la pertinente pérdida de efectividad que hemos comentado anteriormente.
Exceso de agua en el plato.
Debemos intentar siempre, en el momento de la hidratación inicial, vaciar el sobrante de agua, recordad: húmedo pero no encharcado. Demasiada hidratación suele conllevar malos resultados. Con exceso de calor, por ejemplo, que haya demasiada agua puede propiciar que las semillas se pudran o abran ya en muy mal estado. Ésta es una de las cosas por las que no nos gusta el método del vaso de agua.
Raíz demasiado larga
A partir de las 48 horas germinando, es importante al menos una vez al día destapar los platos para ver la evolución de nuestras semillas, ya que una raíz demasiado extensa puede causar varios problemas. Tanto en su manipulación para colocarla en el semillero que usemos después, con riesgo de que se parta la raíz, como la adaptación al medio de cultivo tras sacarla del plato como veremos posteriormente.
Enterrar después de germinar
Creemos que tras la germinación no es buena opción enterrar la semilla entera 2 cm como se recomienda en otros artículos y se viene diciendo desde hace tiempo. Somos mas partidarios de si la raíz tiene entre 2 y 3 cm, enterrarla a la mitad, dejando siempre la “cáscara” hacia arriba y la raíz hacia abajo, ahorrándonos así que a nuestra plantita le cueste demasiado abrirse paso entre el sustrato y poder ver nosotros su evolución en todo momento.
Demasiada luz
Tenemos que tener en cuenta que hay que germinar siempre a oscuras, y que una vez germinada nuestra semilla los 10 primeros días son los mas delicados. Hay que distinguir en la época del año en la que cultivamos. En abril, una vez colocada tu planta ya en la maceta, la podríamos poner directamente al sol directo sin riesgo de quemarla, incluso en las horas del día de mas intensidad lumínica. Sin embargo si hacemos esto en julio o agosto (incluso junio en el sur) no tardaríamos ni una hora en perder nuestra planta.
Si cultivamos en interior habría que subir bastante el foco y bajarlo progresivamente conforme fueran pasando los días y nuestra planta fuera adquiriendo fuerza.
Demora en la germinación
Se nos puede dar el caso de que una semilla nazca incluso a los 10 días de que la hayamos puesto a germinar, esto sería indicio de varios factores, uno puede ser que no tengamos las condiciones mas óptimas para nuestro cometido, temperatura, humedad… o que nuestra semilla no haya estado bien conservada o por nosotros o por la tienda que nos la haya vendido.
Una vez germinada nuestra semilla ¿Qué medio de cultivo usaremos?
Esta es una pregunta muy recurrente, a nosotros personalmente nos gusta usar los semilleros de turba tipo “jiffy” (nunca para germinar directamente) colocando aquí nuestra planta hasta que suelte la “cáscara” y abran las dos primeras hojas, momento en el cual la pasaremos a una maceta pequeña si es semilla regular o a la maceta definitiva si es autofloreciente. Con los semilleros de turba hay que tener cuidado si no se han usado nunca, debemos escurrirlos y humedecerle a continuación la parte baja porque corremos el riesgo de pudrir nuestra semilla.

Si te ha quedado alguna duda sobre la germinación del cannabis, pregunta o quieres compartir tu método perfecto con nosotros, déjalo en los comentarios o ponte en contacto con nosotros.